El origen de nuestro Queso de Cabra Curado Artesano, nace a través de la curiosidad, en nuestra zona es habitual la fabricación de quesos artesanos en base de leche de oveja, pero casi no existían en base a leche de cabra, el sabor de la leche de cabra es más fuerte y ácido que el de la leche de oveja y vaca, lo que convierte a este producto, si se desea fabricar de manera artesana y con una curación mínima de 6 meses, en un reto.
Buscabamos conseguir el toque dulce que tienen los mejores quesos de oveja curado artesanos en un queso de cabra envejecido durante medio año, unir el incomparable sabor de la leche de cabra con su fuerza y aroma, con ese ligero sabor a toffee de los mejores quesos, a través del dominio de la fabricación, el uso de la mejor leche fresca de cabra de la recogida del día, control del producto, mimando cada uno de sus pasos, hasta su expedición, consiguió su objetivo, un Queso de de Cabra curado Artesano con un sabor y roma incomparable, donde se aprecia el ligero toque dulzón al final del paladar, la cristalización de la proteína debida a la larga curación, que hace crujiente la pasta y una saladura perfecta.
La leche con la que se fabrica nuestros quesos de Cabra, procede de Cabras de raza Murciano Granadinas, la leche que se obtiene de esta raza es de alto alto contenido en proteína y grasa, ideal para la fabricación del
queso, es un tipo de raza claramente lechera, donde las producciones medias en animales de 2º parto en adelante son de 530 litros por lactación normalizada (210 días), las medias de grasa oscilan entre 5,6-5,8 % y las de proteína entre 3,6-3,8%.
